la mentira tiene patas cortas me decía mi abuela Ramona
pero la tristeza tiene piernas largas retrucaba mi abuelo Toribio
por eso no te escondas porque igual te alcanzara ,decía mi tía Elisa
pero si te atrapa distraído, no lo dudes ,invítala a bailar, aconsejaba mi tío Alberto.
el diablo me quiso raptar la otra noche, me susurra al oído mi prima Lourdes.
ayer soñé que la escuela se incendiaba y hoy me desperté feliz decía mi primo Javier.
soy de los que tira la piedra y no esconde la mano ,lo digo por las dudas ,aclara el tío Erico.
la caridad empieza por casa dice mi padre mientras prepara el aperitivo dominical
esta soledad no puede ser disimulada por el televisor ,murmura despacito la tía René
y allí en aquel rincón, ese niño con libreta en mano toma nota de todo lo que escucha
quizás dentro de algún tiempo estos apuntes me sirvan para algo se dice a si mismo
( tenia razón mi madre cuando decía "uno nunca sabe"...)
Las grandes verdades que escuchabamos en los patios de nuestras casas o en las casas de los parientes.
ResponderEliminarEs verdad... tarde o temprano enfermamos de adultez!!!
Un abrazo Luis!!
La única que nunca escuché es la de que la tristeza tiene piernas largas.... y me interesa saber por qué... por ahí me crecen un poco las piernas... ;)
ResponderEliminarAsí es, Luis.
ResponderEliminarCada palabra, cada gesto, cada impresión de la infancia se refleja en la edad adulta.
Un abrazo.
qué suerte tener alrededor "gente" que dice tanto... y qué suerte sentir esa necesidad de aprender ...
ResponderEliminar¡cómo me alegro!.. así aprendo yo.
muchas gracias Luis
eres grande..
un beso enorme
isla
ja... los mayores, esos q cuando éramos pequeños siempre llevaban razón y ahora q hemos crecido no acertamos a saber cómo podían hacerlo así, tan fácil...
ResponderEliminarun abrazo!
La capacidad de observación y escucha son grandes virtudes de la infancia que, normalmente, ignoramos los adultos (realmente lo hemos olvidado). ¿Tü estabas con tu libretita en mano, recogiendo ,anotando...? Se te nota Luis. Tus excelentes reflexiones te delatan.
ResponderEliminarUn beso fuerte,
Besos,
Pues yo tengo un serio problema, a mí no me ha dado esa enfermedad.
ResponderEliminarUna niña.
Y ahí el niño tomando nota de las grandes enseñanzas familiares y volviéndose adulto.
ResponderEliminarYo estuve enferma de eso y no te creas de tanto en tanto tengo mis recaídas, pero cuando me curo soy muy feliz, y hasta recupero un brillo en los ojos que creía perdido!
Besos.
Este tipo de sentencias..luego resuenan en nosotros,ya sea en pensanmiento o sentir.
ResponderEliminarBesos
ELIJO AL NIÑO Y A LA TIA RENE.
ResponderEliminar"La mucha bondad causa menosprecio"
ResponderEliminarEsa la decía mi abuela y ¡Es verdad!
Me ha encantado darme cuenta que soy vieja en este lenguaje.
Un abrazo enorme Luis
Me encantó el remate final. Y el dibujo esta buenisimo!
ResponderEliminarAdoro visitar este sitio.
Beso!